Para hacer el énfasis en la necesaria formulación de los objetivos y las estrategias que los sirven de una manera tal que sean dinámicas y que permitan su adecuación en el tiempo a los cambios, cada vez más rápidos, que ocurren en el mercado. Una mala táctica puede ser corregida, pero si el análisis estratégico está equivocado, difícilmente se enmendará el rumbo de forma exitosa.